Eduard Punset y la vida cotidiana

Punset en Noche Hache (Cuatro)

El viaje al amor.

El tercer encuentro entre Punset y Buenafuente



Hay que tener paciencia, pero es interesante, entretenido e incluso divertido. Me alegró coincidir con él en que es positivo "desaprender" y también que actitudes cuestionadas hasta por los propios padres, como la protección y el amor incondicional a los hijos es tan de sentido común que sobra pensar en ello y es también "extraño" tener que aprenderlo puesto que es fundamental para el desarrollo de la capacidad de amar y la propia seguridad, tanto interior como hacia el mundo exterior del homoh.

Y tambien dice: "Mi consejo no es tanto que nos esforcemos en ser creativos –se podrá o no -incidir en nuestra estructura cerebral– como en saber distinguir entre el pensamiento creativo y el que no lo es en los demás. Desconfiemos de todos aquellos que tienen un mecanismo perfecto de inhibidores neurológicos. Y confiemos en aquellos cuyos defectos les permiten atender a los sentimientos de los otros, intereses diversos, realidades, quimeras; así como desatender –por lo menos durante un rato– lo que es fruto exclusivo de los intereses o las ideas de uno mismo".