Cosas muy, muy serias...
Globalización y democracia
(Michael Parenti/05-06-2007)
La OMC, actuando como juez supremo global, ha echado abajo leyes consideradas como “barreras al libre mercado”. Ha forzado a Japón a aceptar una tasa mayor de residuos de pesticidas en la comida importada. Ha prohibido a Guatemala proscribir publicidad engañosa de comida de bebés. Ha eliminado la prohibición de asbesto en varios países, así como las leyes para el ahorro de carburante y para los estándares de emisiones en los vehículos. Se ha posicionado contra las leyes de protección de la vida marina y contra la prohibición de productos hechos a partir de especies amenazadas.(...)La prohibición de la Unión Europea de importar carne norteamericana alimentada con hormonas contaba con un apoyo popular arrollador en toda Europa, pero un grupo de tres especialistas de la OMC decidió que esta prohibición era ilegal. Esta decisión puso en peligro multitud de regulaciones sobre la importación, basadas en consideraciones de salud. La OMC eliminó parte del U.S. Clean Air Act (Ley de Aire Limpio de EEUU) que prohibía ciertos aditivos de la gasolina, puesto que esa prohibición interfería con las importaciones de refinerías extranjeras. Así mismo, la OMC eliminó la parte del U.S. Endangered Species Act (Ley de Protección de Especies Amenazadas de EEUU), que prohibía la importación de gambas pescadas con redes que no protegían a las tortugas marinas (3).(...)
El comercio libre no es un comercio justo; beneficia a los países fuertes a expensas de los débiles, y a los intereses de los ricos a expensas del resto de nosotros. La globalización significa un paso atrás en muchas de las reformas del siglo XX: ninguna libertad para boicotear productos, ninguna prohibición del trabajo infantil, ninguna garantía de salario mínimo o de ahorro, ningún servicio público que pueda competir razonablemente con los servicios privados, ninguna protección sanitaria que pueda menguar los beneficios de las corporaciones,
(Michael Parenti/05-06-2007)
La OMC, actuando como juez supremo global, ha echado abajo leyes consideradas como “barreras al libre mercado”. Ha forzado a Japón a aceptar una tasa mayor de residuos de pesticidas en la comida importada. Ha prohibido a Guatemala proscribir publicidad engañosa de comida de bebés. Ha eliminado la prohibición de asbesto en varios países, así como las leyes para el ahorro de carburante y para los estándares de emisiones en los vehículos. Se ha posicionado contra las leyes de protección de la vida marina y contra la prohibición de productos hechos a partir de especies amenazadas.(...)La prohibición de la Unión Europea de importar carne norteamericana alimentada con hormonas contaba con un apoyo popular arrollador en toda Europa, pero un grupo de tres especialistas de la OMC decidió que esta prohibición era ilegal. Esta decisión puso en peligro multitud de regulaciones sobre la importación, basadas en consideraciones de salud. La OMC eliminó parte del U.S. Clean Air Act (Ley de Aire Limpio de EEUU) que prohibía ciertos aditivos de la gasolina, puesto que esa prohibición interfería con las importaciones de refinerías extranjeras. Así mismo, la OMC eliminó la parte del U.S. Endangered Species Act (Ley de Protección de Especies Amenazadas de EEUU), que prohibía la importación de gambas pescadas con redes que no protegían a las tortugas marinas (3).(...)
El comercio libre no es un comercio justo; beneficia a los países fuertes a expensas de los débiles, y a los intereses de los ricos a expensas del resto de nosotros. La globalización significa un paso atrás en muchas de las reformas del siglo XX: ninguna libertad para boicotear productos, ninguna prohibición del trabajo infantil, ninguna garantía de salario mínimo o de ahorro, ningún servicio público que pueda competir razonablemente con los servicios privados, ninguna protección sanitaria que pueda menguar los beneficios de las corporaciones,
Etiquetas: neoliberalismo
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio